El trabajo no abunda.
Las posibilidades de ascender son cada vez menores.
Los salarios no viven precisamente su mejor momento.
Aferrarse a un puesto que, en otras circunstancias, habrías abandonado sin pensárselo, es tu única opción …….
Bla bla bla
Solo te digo esto: Quejarnos continuamente puede ser útil en el corto plazo, pero no en el largo y lo único que vas a conseguir quedándote donde estás es envenenar tu ánimo.
Y te pregunto ¿vale la pena aguantar a disgusto en un puesto de trabajo?
Lo dice un viejo dicho: sabes cuánto odias tu trabajo (y por ende tu vida) en función de cómo te sientas el domingo por la noche.
Lo sé, necesitas tener ingresos y no te puedes permitir irte de tu trabajo, tienes ciertas responsabilidades, como tu familia, a los que atender. Y además puede ser que seas de las que piensa “Salgo de Málaga y me meto en Malagón” para eso me quedo donde estoy o “Es el mismo perro, pero con distinto collar”.
El caso es que tienes un cóctel molotov en tu cabeza de lo que quieres y de lo que debes. Y seamos sinceras todo el mundo te dice que la cosa no está ahora como para cambiar de trabajo. Te lo repiten tantas veces que ya lo has interiorizado y casi que has tirado la toalla esperando que toda esta pandemia mundial mejore y quizá más adelante …. ¿Puedas ser feliz, sentirte útil y disfrutar con tu trabajo?
Pues tengo una noticia para ti: Hay trabajo, si sí, hay trabajo, el mercado se mueve y cada día hay ofertas.
Y con todo esto no te digo que dejes tu trabajo NO, con todo esto lo que quiero hacerte ver es que, una transición de este tipo (y más en los tiempos que estamos) requiere de una estrategia, de hacer las cosas con cabeza, de no ir a lo loco, pero sí de tomar acción.
Insisto que con esto no quiero decir que te vaya a dar una fórmula mágica para cambiar el rumbo de tu vida o situación laboral en un dos por tres. Más bien, te daré ese empujón que necesitas para animarte a buscar un nuevo trabajo, mejorar el que ya tienes o (¿por qué no?) emprender tu propio negocio.
Vamos paso a paso:
- Elaboremos primero una lista de ¿Por qué dejar el trabajo?, te pongo ejemplos de causas bastantes comunes entre todos los mortales
- Porque no valoran tu trabajo como te gustaría
- Porque sabes que no vas a crecer más
- Porque lo que haces no te gusta
- Porque quieres emprender.
2. Hagamos otra lista de ¿Cuándo dejar el trabajo?
- Cuando ya lo has pensado bastante
- Cuando estás segura de que lo mejor es renunciar
- Cuanto ya tienes un plan B en mente
- Cuando te has preparado financieramente
3. ¿Cómo dejar el trabajo?
Lo primero que te aconsejo es que no te tires a la piscina si aún no tienes agua, por eso mis consejos son:
- Elabora un plan, ten una estrategia
- Crea un buen currículo
- Haz networking
- Desarrolla proyectos paralelos a tu trabajo
- Contrata a un coach de carrera que te ayudé a planificar cada paso y que te guie hacía el trabajo que realmente quieres y te hace feliz.
Porque si vamos a cambiar de trabajo, vamos a hacerlo bien ¿no?
Lo importante es que encuentres un trabajo que te apasione y te haga sentir realizada a nivel profesional.
Quizás descubras que no es estás preparada para renunciar a tu trabajo, pero sí para asumir un reto superior y te animes a pedir a tu jefe un nuevo puesto dentro de la empresa.
No caigas en el borreguismo mental, esto no tiene que ser un cambio drástico de la noche a la mañana. No seas de esas que se pone mil excusas para convencerse a sí misma que dar un giro en su vida laboral es un error.
Yo misma soy testigo de todas las alumnas que han pasado por mi programa Por fin es lunes y que estando en plena pandemia han conseguido cambiar de trabajo.
Si ellas pueden tú también.
Y recuerda,
Crea tu buena suerte con confianza, coraje y constancia. Y haz que suceda.
Un abrazo y gracias por acompañarme semana a semana.
Marta Zúñiga