8.40 de la mañana. 20º en Madrid. Enfilamos hacia el retiro.
Mis padres me han dicho toda la vida que hemos venido a este mundo para, primero ser felices y segundo hacer la vida más fácil a los que nos rodea, decía Bárbara.
Pues a mi en mi casa me han dicho que la vida es muy complicada, que se sufre mucho y hay que aguantar lo que te venga. Hay que ser fuerte. De la felicidad no me dijeron nada. Tengo claro que mis padres querían que fuéramos felices y que todo lo que hacían por nosotros era con ese objetivo. Aunque ellos mismos esa felicidad no la buscaron para ellos.
Me quedo pensando un rato si yo se lo digo a mi hija…
9 de la mañana y estamos dando la vuelta al lago.
Bárbara va con ropa de deporte y con intención de “trotar” un rato por el parque. Es su momento del día, lo que le da energía para aguantar la carga de trabajo y estrés que tiene ahora en su agencia de publicidad.
Yo voy con la perra, como todas las mañanas. Ya no corro mucho por mi fascitis y mi rotula así que ando más que corro.
¿Tú que crees que conforme nos hacemos más mayores ganamos seguridad o tenemos más miedos?
Yo siempre digo que cuando era joven era más valiente. Me lanzaba más que ahora. Ahora soy una rumiadora profesional y tardo más en ir a por las cosas que realmente tienen sentido para mi. Reflexiono tanto que retraso las decisiones demasiado. Supongo que es porque hay más personas y cosas en juego. ¿A ti te pasa?
A mi no, me dice Bárbara. Yo soy de acción. Si tengo que tomar una decisión, la pienso, pregunto a mi entorno y decido. Me como mucho el tarro, pero no durante tanto tiempo.
El otro día Laura Baena, la de Malasmadres, comentaba que ella con 37 años se sentía más segura y aceptaba más y mejor sus defectos. Sus pecas, sus ojeras, su pandero.
¿Desde que perspectiva vives tu vida? ¿Desde esa búsqueda de la felicidad propia y la de los que te rodean o desde el sacrificio y el dolor porque hay que aguantar?
¿Cuántas cosas estás aguantando, desde hace mucho tiempo, que no te hacen feliz?
- Una pareja con la que ya no eres feliz y con pocas cosas en común. Pero aguantas.
- Un trabajo que hace mucho que no te motiva, te estresa y consume. Pero aguantas.
- Un hijo adolescente que te falta al respeto y no valora todo lo que haces. Pero aguantas.
- Una vida con excesos, demasiado alcohol, demasiado tabaco, demasiado…que sabes que no es buena para ti. Pero aguantas.
- Un jefe mediocre, insoportable y tirano que no te permite crecer. Pero aguantas.
- Un miembro de tu equipo que es tóxico y contagia al resto esa negatividad, Pero aguantas.
¿Y por qué aguantas? ¿Cuál es el miedo que hay detrás?
Miedo a la soledad, miedo a no tener trabajo y por lo tanto dinero, miedo al rechazo, miedo a enfrentar la vida y lo que te está sucediendo, miedo a destacar y a sacar tu liderazgo… ¿A qué le tienes miedo?
¿Estás viviendo la vida ergo estas situaciones desde la perspectiva del no sufrir? Como no quieres sufrir más o hacer sufrir a los que te rodean, no haces nada. Y aguantas.
Pero al final el silencio habla. Y tomar decisiones es una acción también.
¿Estás viviendo tu vida desde la perspectiva del conformismo, del no quiero sufrir o desde el coraje de mi amiga Bárbara, yo he venido a este mundo para ser feliz y hacer feliz a los que me rodean?
¿Qué decisiones tomarías, desde ya, si el coraje y la determinación fueran tu filosofía de vida?
Y recuerda,
Crea tu buena suerte con confianza, coraje y constancia. Y haz que suceda.
Y si necesitas ayuda para dar el primer paso, me puedes encontrar en mz@talentjuice.net